Resumiendo.

He comprobado nuevamente como el reloj acaba las horas, manifestando así, el nuevo día. Ayer mis amigos me invitaron a tomar y decidí no festejar. ¿Realmente tengo motivos para festejar?, aun no lo se, ayer no lo comprendía del todo y quizás en mucho tiempo no lo sabré con certeza, pues creo que hay cosas que aun deben cambiar para poder entender ese tipo de preguntas.

Como nunca, la decidía me acompaña, solo que esta vez un toque rosa punketo, desdeñable y hasta andrógino acompañan mis oídos, pues las melodías de: “Dresden Dolls”, me están llevando a lo que será mi nueva entrada en este blog.

Hace 2 días exactos, fue 22 de junio, tiempo que tome para pensar y reflexionar, sin embargo, hoy es el cuarto día en que mi cuerpo no recibe nicotina, por enésima vez he decidido dejar de fumar, solo, que esta vez la voluntad si tiene nombre.

Ese domingo decidí encender mi computador con cierta tranquilidad. Darle importancia a una serie de HBO y dedicarle algo de tiempo. Debo acotar, que un amigo mío me recomendó hace muchísimo tiempo atrás esta obra maestra. Nunca escuche sus fabulosas palabras y criticas al respecto (no estaba lo suficientemente interesado, para ese entonces).

Ahora comprendo porque no estaba interesado.

“TELL ME YOU LOVE ME”, si: “dime que me amas”.

¿Que vaina tan jodida en la vida no?, DIME QUE ME AMAS.

La cuestión es que gracias a este regalo, producto de la casualidad, he entendido muchísimas de las cosas por las cuales mi vida atraviesa en estos momentos. Tan solo por una serie de televisión.

Como quisiera poder mostrársela.

Como quisiera hacer algo que no hice.

Hoy, la distancia aunque sea algo que no debería tener lugar en mí: “para muchos”, presente está.

Hoy, alguien especial para mí cumple años.

Hoy: otro 24 sin poder.

G.